Por: Héctor Brito.
Es un reto no decirte que eres paralizantemente hermosa, no verte en mis sueños, no pasar cada segundo pensando en ti, no sonreír cada vez que apareces frente a mí para no ser tan obvio, concentrarme, no ser torpe o no quedarme embobado mirándote cuando estás cerca, controlar los latidos de mi corazón cada vez que me miras, no sentir envidia de los que pueden pasar mucho más tiempo contigo que yo, no sentirme triste cada vez que pasas frente a mí y haces como si no existo, no mirar a todos lados cuando voy en la calle con la esperanza de encontrarte entre las personas que transitan, no imaginarme momentos hipotéticos e imposibles contigo, no derretirme con tu figura, no sentir que me desarmas con tu dulce voz; pero el reto más GRANDE es no amarte con todas mis fuerzas. Siempre me terminas dejando en ridículo, pues nunca logro superar ni siquiera uno solo de esos retos, un día de estos me voy a cansar y te voy a robar un beso.
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